Planificación estratégica ¿Cómo llevarla a cabo?

¿Cómo llevar la estrategia desde la formulación a la planificación? ¿Cómo aterrizar las definiciones estratégicas en una planificación de iniciativas que la materialicen? En este artículo buscaré orientar como hacerlo. Continua leyendo para saber más.

Las etapas en un proceso de análisis, definición y planificación estratégica

Antes de explicar cómo podemos hacer una planificación estratégica, es conveniente aclarar cómo la planificación estratégica se enmarca dentro de un proceso macro para definir la estrategia de una empresa.

Un proceso de análisis, definición y planificación estratégica consiste en diferentes etapas, que una organización debiese llevar a cabo de forma secuencial. Revisamos estos pasos a continuación

Primero: Definición de los elementos base de la estrategia: 

Como fundamentos de su estrategia, la organización debe definir su misión, visión y propósito, así como también sus valores. A pesar de que estos elementos se definen para el largo plazo y algunos de ellos suelen ser inmutables una vez definidos, en un proceso de definición de la estratégia que marcará la dirección de una empresa en los próximos años, es recomendable revisarlos y reajustar su definición si es necesario.

Segundo: Análisis de situación: factores externos e internos

Naturalmente, no se puede elaborar ninguna estrategia sin primero analizar la situación de la organización. Una empresa debe analizar tanto de su medio externo, como sus condiciones internas. Aquí típicamente se utilizan herramientas de análisis como el análisis FODA, el análisis PEST o su versión extendida, PESTEL. 

Estas metodologías se pueden complementar con otras como la conocida matriz BCG que examina la situación de distintos productos o líneas de negocios de la compañía, o el análisis VRIO, para analizar la posición de la empresa desde el punto de vista de los recursos de la organización.

Tercero: Formulación estratégica

En base a las definiciones fundamentales de la primera etapa, y a los análisis externos e internos que se realizan en la segunda etapa, el tercer paso consiste en formular la estrategia de la organización. Para ello, se pueden utilizar marcos de definición como lo enseñado por los autores de playing to win de Roger Martin, el modelo delta de Arnoldo Hax o blue ocean strategy de Kim y Mauborgne 

La formulación de la estrategia requiere definir:

  • Ejes estratégicos: También llamados pilares o focos estratégicos, que corresponden a los grandes desafíos que la empresa debe llevar adelante para su estrategia.
  • Objetivos estratégicos:  Las aspiraciones de la empresa por lograr en los próximos 3 a 5 años
  • Un modelo estratégico que ilustre la estrategia: Existen varias formas que pueden usarse para resumir la estrategia. Puede ser un mapa estratégico, un One Page Strategy o alguno sui generis

Cuarto: planificación estratégica

Aquí es cuando la empresa debe traducir sus definiciones estratégicas en un plan concreto, que detalle las iniciativas que materializarán la estrategia, los roles y equipos involucrados, y los indicadores clave que se seguirán para monitorear el avance de los objetivos estratégicos.

Quinto: Programación estratégica

La programación estratégica es la profundización y detalle de cada una de las iniciativas que están contempladas en el plan estratégico. Para ello, se puede recurrir a herramientas de planificación como cartas gantt, que detallen las tareas de cada iniciativa y sus hitos principales, especificando para cada una de ellas su calendarización y duraciones contempladas. En este tipo de instrumentos se suele especificar también el responsable de cada tarea y elementos que den cuenta del grado de avance a la fecha.

Lo siguiente luego de realizar todas las etapas es pasar a la fase de implementación y control de gestión, en donde se debe realizar un constante seguimiento, con una frecuencia a los menos mensual del avance de cada iniciativa estratégica.

Entonces, ¿qué es la planificación estratégica?

Aquí debo mencionar que pueden existir discrepancias en cuanto a cómo distintos autores, académicos, consultores y profesionales dedicados a esta actividad entienden que es la planificación estratégica. Algunos la entienden como el proceso estratégico global, comprendido desde las definiciones fundamentales hasta la planificación y programación de las iniciativas, incluyendo los debidos análisis.

En este artículo, cuando me refiero a la planificación estratégica, me estoy refiriendo a cómo pasar de la formulación estratégica a la planificación de iniciativas en las diferentes áreas de una organización. Es decir, lo que he definido como el cuarto paso del proceso estratégico de una organización. En la siguiente sección revisaremos una forma de llevar a cabo esta labor. 

¿Cómo hacer una planificación estratégica?

Es muy probable que exista más de una forma de implementar una planificación estratégica y también más de una herramienta para materializarla. En este artículo te presentaré una de ellas, que he aprendido en cursos de estrategia: la agenda estratégica.

La agenda estratégica es una herramienta concebida por Hax, el autor del modelo Delta para la estrategia de un negocio. Este instrumento organiza de manera práctica y específica las iniciativas que deben realizarse para concretar los ejes estratégicos definidos en la formulación estratégica y alcanzar los objetivos estratégicos trazados.

La agenda estratégica permite especificar de forma estructurada y concisa la siguiente información:

  • El listado de iniciativas que harán efectiva la estrategia. Los autores de esta herramienta llaman a estas iniciativas “impulsos estratégicos”.
  • El nivel de priorización, especificado mediante un ranking de priorización o por medio de una escala de prioridad (prioridad alta, media, baja)
  • Las áreas de la organización que deben involucrarse en cada una de las iniciativas. Esto es un componente clave para conseguir el alineamiento e involucramiento de las áreas competentes.
  • El rol que estas áreas ejercerán: liderazgo, rol activo, rol de apoyo, etc.
  • Indicadores de rendimiento, normalmente llamados KPIs (key performance indicator). Opcionalmente en esta herramienta también pueden especificarse metas asociadas a estos indicadores, aunque esos números pueden definirse en una instancia posterior.

Vemos un ejemplo de cómo podría lucir una agenda estratégica. Esta imagen fue extraída de un trabajo realizado para una corporación de carácter mutual que otorga cobertura de seguridad frente a accidentes laborales y desarrolla programas de prevención de riesgos.

Como puedes ver, en este instrumento de planificación estratégica se han detallado cada una de las iniciativas estratégicas y cómo las distintas áreas participan en su realización. Este documento permite alinear y movilizar a toda la organización en torno a la estrategia definida y sentar las bases para programar su ejecución en un horizonte de tiempo dado. 

Espero que este artículo te haya orientado sobre cómo llevar una planificación estratégica de buena forma. Si necesitas ayuda para definir la estrategia de tu negocio, te invitamos a contactarnos en nuestro formulario de contacto. ¡Te esperamos!

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